El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa y la forma más común de demencia (abarca entre el 60% y 70% de los casos). De hecho, constituye una de las principales causas de discapacidad y dependencia en las personas mayores en el mundo1. Asimismo, según los datos de la OMS en 2021, el Alzheimer afecta a 55 millones de personas en el mundo (alrededor del 5% de la población mundial de edad avanzada), y se calcula que aumentará a 78 millones en 2030 y a 139 millones en 20502.
En la enfermedad de Alzheimer las proteínas beta amiloide y la tau hiperfosforilada se acumulan en el cerebro de manera precoz formando placas y ovillos alrededor de las neuronas, originando daño neuronal3. Como consecuencia, hay un deterioro progresivo afectando al funcionamiento normal de la conducta, la cognición y los estados psicológicos, impidiendo la vida autónoma2.
El desarrollo de esta enfermedad no se debe solo a una única causa, sino que son varios los factores de riesgo como la genética o la edad. Así pues, en varios estudios se ha observado que el consumo de alcohol es un factor de riesgo para el desarrollo de Alzheimer en personas de edad avanzada. En concreto, se realizó un estudio para estudiar la relación entre la cantidad y tipo de alcohol y el deterioro cognitivo en una cohorte de pacientes con Alzheimer procedentes de Estados Unidos y París. Para ello la cantidad de alcohol que consumían se categorizó en tres grupos: los abstemios, los consumidores moderados (1-7 bebidas alcohólicas por semana) y los consumidores fuertes (8 o más bebidas alcohólicas por semana). Además, 1 bebida alcohólica equivalía a 1 lata de cerveza (355 ml), 1 vaso de vino (118 ml) o 30 ml de cualquier tipo de bebidas espirituosa. Al final del estudio los resultado mostraron que los consumidores fuertes de bebidas alcohólicas tenían un deterioro cognitivo más rápido que los abstemios o consumidores moderados. Sin embargo, a la hora de comparar el deterioro cognitivo entre los consumidores moderados y los abstemios no hallaron diferencias significativas. Asimismo, el aumento de la ingesta estándar de bebidas espirituosas, pero no de cerveza o vino, se asoció a un deterioro cognitivo más rápido4.
De igual modo, un equipo de la Universidad de Oxford ha publicado recientemente un estudio que ha llevado a cabo para investigar si hay una relación causal entre el consumo de alcohol y niveles de hierro aumentados en el cerebro ya que la deposición de hierro en el cerebro se ha visto vinculada a varias condiciones neurodegenerativas incluyendo el Alzheimer y el Parkinson. En otras palabras, para saber si el alcohol es un factor de riesgo para el desarrollo del deterioro cognitivo. Por lo tanto, para medir el consumo de alcohol se basaron en que 1 unidad en Reino Unido = 8 g de etanol puro (un vaso de vino tinto o blanco = 1,7 unidades; una pinta de cerveza = 2,4 unidades; 1 vaso de bebidas espirituosas= 1 unidad). Como resultados obtuvieron que aquellas personas que consumían alcohol por encima de 7 unidades (56 g) a la semana se asociaron con niveles de hierro aumentados en el cerebro, que a su vez se asoció con una peor función cognitiva5.
En conclusión, los diferentes estudios sugieren que el consumo de alcohol puede ser un factor de riesgo para el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. No obstante, es necesario continuar investigando para saber cómo funciona para así frenar esta enfermedad que está afectando a millones de personas.
1 Organización Mundial de la Salud. (2021). Demencia. https://www.who.int/es/news/item/02-09-2021-world-failing-to-address-dementia-challenge
2 Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. (2019). Plan integral de Alzheimer y otras demencias (2019-2023). Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, 94 p.
3 Clínica Universidad de Navarra. (n.d). Enfermedad de Alzheimer. https://www.cun.es/enfermedades-tratamientos/enfermedades/enfermedad-alzheimer
4 Heymann D, Stern Y, Cosentino S, Tatarina-Nulman O, Dorrejo JN, Gu Y. (2016). The Association Between Alcohol Use and the Progression of Alzheimer’s Disease. Curr Alzheimer Res.13(12):1356-1362. doi: 10.2174/1567205013666160603005035
5 Topiwala A, Wang C, Ebmeier KP, Burgess S, Bell S, Levey DF, et al. (2022). Associations between moderate alcohol consumption, brain iron, and cognition in UK Biobank participants: Observational and mendelian randomization analyses. PLoS Med 19(7): e1004039. https://doi.org/10.1371/journal. pmed.1004039